Parte de la vida. Pese al pos modernismo y liberalismo en que vivimos, el matrimonio es parte del proyecto de la naturaleza de la vida, por lo que un divorcio afecta en gran manera. Asimismo, indica Quesada, es importante que la persona identifique las causas del fracaso de su primer matrimonio, haciendo una reflexión, reconociendo sus errores, de tal manera que esté lo más segura posible de que no sucederá lo mismo.
Nueva oportunidad. Por su parte, la psicóloga Gladys Brenes en el sitio mentesana.net, explica que si se trabaja en valorar que pasó antes, se identifican los errores y fallas y se tiene seguridad de que para esta próxima ocasión las situaciones del pasado no interferirán, la persona no tiene por qué sentir temor de volverlo a intentar. “Es necesario analizarse no solo a uno mismo, sino también a la pareja y determinar si realmente es la persona con la que quiere estar para no repetir patrones, pues a veces las personas se relacionan con otras que no convienen y se tiende a buscar parejas con las mismas características”, señaló.
No dejarse llevar por su situación. Pero al igual que la primera vez, es necesario que dar un paso para un segundo matrimonio, se piense en los factores que contribuyeron al primer fracaso matrimonial. Por ejemplo, si el fracaso del matrimonio anterior fue por presiones financieras, podría caer en el error de dejarse llevar por quien parezca poder darle una estabilidad económica sin analizar qué puede suceder en un futuro.
No comparar. Por otra parte, cabe recordar que cada persona es diferente, además, se debe tener presente que cuando se empieza a vivir con una pareja se empiezan a descubrir virtudes y defectos, situación que lo podrían llevar a hacer una comparación con su anterior pareja, lo que sería contraproducente.
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