Alejandro Gutiérrez Eklund y Mariana Eterovic sellaron su amor, por lo religioso, en la capilla del Asilo de Ancianos, y después celebraron en la quinta de la familia Terceros, decorada por Quito Velasco siguiendo el estilo campestre.
La pareja se conoció mientras estudiaba en Buenos Aires y decidió que el matrimonio coronaría la profesionalización.
La boda fue muy original. La comida, preparada por Ricardo Cortez y sugerida por la novia, que es chef, consistió en quesadillas, nachos, costillitas de cerdo a la barbacoa y hamburguesas
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