Al parecer, la Duquesa de Cornualles estaría cansada de la agenda apretada que su condición de miembro de la Familia Real Británica le ha obligado a asumir.
Carlos y Camilla se conocieron hace 40 años, pero el primogénito de la reina Isabel II desoyó el llamado de su corazón para hacer un matrimonio de conveniencia con Lady Diana Spencer. Un enlace que no fue feliz, precisamente debido a que el príncipe jamás pudo olvidar a la dama y se convirtió en su amante a pesar de que para entonces también ella se había casado.
Años más tarde, tras la muerte de Lady Di y el divorcio de Camilla la pareja pudo por fin casarse. Una unión que, según la revista Globe, ahora "hace agua". Un amigo de la pareja habría dicho a ese medio que "el matrimonio está en muy mal estado y la Duquesa quiere pasar más tiempo con sus 5 nietos". "Ella sólo quiere llevar una vida tranquila en el campo", agregó el testigo no identificado.
Aún así, no se trataría del fin del amor. El amigo de la pareja dijo que ambos siguen enamorados: "Cuando se casaron, nadie pensó que esto pasaría porque, para Carlos, Camila es el amor de su vida y lo sigue siendo".
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