Como prueba de su desinterés por el dinero de su nueva esposa, Díez sólo percibirá 2 mil euros mensuales por dejar su trabajo, para dedicarse a fungir como esposo de la mujer con más títulos y nombres sobre la faz de la tierra. Ésta es la tercera vez que la Duquesa de Alba se casa y, días después de contraer nupcias, publicó un volumen con sus memorias titulado Yo, Cayetana. La obra recorre su vida como una de las aristócratas más ricas. En su libro le dedica unas líneas a su nuevo marido que rezan: “Hoy tengo el corazón repleto y ocupado por un hombre estupendo”.
Se salió con la suya
Quienes la conocen, la describen como una mujer que siempre consigue todo lo que se propone y el 5 de octubre, Sevilla y el mundo fueron testigos de su tercera boda. Cayetana y Alfonso se desposaron en el Palacio de las Dueñas y, según califica el diario El País, fue una ceremonia triste porque dos de los hijos de la aristócrata se ausentaron. Jacobo no le perdona a su madre que llamara mala y envidiosa a su esposa Inka Martí y su ausencia fue el castigo.
Dos años batalló Cayetana contra su familia porque tachaban a Díez de interesado y a la boda, de disparate. Su hijo Cayetano, el menor, aseguró que no estaba de acuerdo con el enlace, pero que la acompañaría. La ahora señora de Díez conoció a su nuevo duque en una tarde de cine en Madrid y, pese a todo, actualmente disfruta su luna de miel en Tailandia.
Oficial
La duquesa de Alba, Cayetana Fitz-James Stuart, firma un documento para contraer matrimonio con Alfonso Díez en la ceremonia celebrada en el Palacio de las Dueñas en Sevilla.
Sencillez
En la capilla, sólo 30 personas, entre familiares y amigos, presenciaron la boda. En cambio, una gran cantidad de gente, fotógrafos y periodistas del área social esperaron en la calle a que los recién casados salieran.
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